lunes, 30 de enero de 2017

#RESEÑA - VIAJE A ARCTURUS de D. Lindsay



Título: VIAJE A ARCTURUS
Autor: DAVID LINDSAY
Editorial: DEFAUSTA
Páginas: 373
Traducción: Susana Prieto Mori






Viaje a Arcturus no se comprende, se experimenta”, lo dice la editora, Susana Prieto Mori en su carta introductoria y no hay mejor frase para resumir una obra como esta.

A la hora de enfrentarse a la obra de David Lindsay hay que tener claro que no es para todos los lectores. Es un libro duro, complicado, más de conceptos abstractos que de narraciones clásicas. Podemos meterlo en el saco de la ciencia ficción dura pero eso dejaría de lado gran parte de la novela ya que, aunque tiene planetas extraños, seres extraterrestres, mutaciones y reglas físicas propias, su gran valor reside en los diálogos filosóficos y teológicos que contiene. Así pues, viendo las dificultades que presenta el catalogarla y hablar de ella, podemos hacernos una idea de la complejidad que encierran sus páginas. 

No, no es una obra para todo el mundo y mucho menos para aquellos que buscan conocerlo todo y coleccionan respuestas. Lindsay te tira a la cara preguntas complejas, algunas tanto que solo su comprensión ya es enormemente dificultosa y cuya respuesta es tan voluble que cuando crees que la tienes desaparece. Haciendo un ejercicio de imaginación, Viaje a Arcturus es el equivalente a tener un cubo de arena fina, de esa que se escapa entre los dedos al cogerla, y con ella tratar de explicarle a alguien que no ha visto el mar lo que es una playa.



Lindsay escribió esta epopeya en 1920, recién llegado de la Primera Guerra Mundial, “la guerra que acabaría con todas las guerras”. Como ha demostrado la historia, no fue así, el pesimismo de la época, tan gris como claustrofóbico, se desprende de su obra con idéntico resultado. Parece haber una estructura circular en Viaje a Arcturus, un viaje que nunca acaba, un ciclo más que un final, una vuelta al comienzo con nuevos desgraciados encerrados en el camino que Lindsay ya ha tomado y cuyo desenlace ya conoce. No hay salida, el viaje te transforma y no dejas de recorrerlo nunca, lo único que cambia eres tú, viajero primero, guía después y quién sabe si enemigo llegado el caso. Lo que está claro es que el destino no tiene importancia, ni la velocidad a la que lo recorres, no compites contra otros, te desafías a ti mismo y toda sensación de victoria es una ilusión.

A medida que pasaba las páginas en compañía de Maskull esa sensación no me ha abandonado, la ilusión, entendida como la falsa apariencia de algo. Veía lo que las vívidas descripciones de Lindsay me arrojaban a la mente, pero sabía que había algo más insondable en el fondo, ¿el qué? Debo ser sincero, no lo sé. Es algo parecido a lo que le ocurre a Maskull durante su periplo por Tormance, periplo que bien podemos entender casi como una penitencia y en el que las ilusiones están tan presentes como ocultas en la tríada de personajes que parecen luchar por mover sus hilos: Krag, Cristalino y Surtur. ¿Dónde acaba uno y empieza otro? Parece haber dos entidades bien diferenciadas, a veces Dios y Demonio, a veces justo a la inversa, es Maskull quien lo ve de una forma u otra según avanza y lo mismo nos ocurre a nosotros, porque no nos engañemos, Maskull es el que camina pero nosotros recorremos su misma senda. 



Hay toda una lista de personajes que se cruzan en el camino de Maskull. Seres tan extraños como intrigantes, con órganos inverosímiles cuya función vamos descubriendo a medida que nuestro protagonista los experimenta en sus propias carnes. Son seres con mentalidades y comportamientos tan dispares que resultan chocantes al mismo tiempo que siempre parecen saber más de lo que dicen. Los diálogos que Maskull tiene con ellos son los puntos más relevantes de la novela y tratan todos los temas que la razón humana se ha planteado desde el inicio de la filosofía, algunos más profundamente y en cuyo interés centra la narración el autor. Hay un cierto tono de condescendencia hacia Maskull en los primeros diálogos, como un niño que no sabe andar y pregunta como echar a correr, pero esto cambia a medida que Maskull madura y crece su conocimiento del mundo, tanto que al final parece ser él que lleva la voz cantante de los diálogos.

No me alargaré más. Viaje a Arcturus tampoco lo necesita. No es una obra que requiera de análisis de ningún tipo. Tratar de comprenderla por completo solo estropearía su función. Se debe saborear, dejarse llevar, permitir que te arrastre en su viaje y al final, con suerte, te dejará un poso capaz de tenerte varios días pensando en lo que acabas de leer.

Solo quiero añadir un reconocimiento enorme a Susana Prieto Mori, editora de Defausta Editorial y traductora, tanto de la obra como de la introducción de Alan Moore, algo que sé de buena mano, le ha supuesto todo un reto y cuyo resultado es un ejemplo de labor de traducción. No dejéis de lado el texto introductorio de Alan Moore porque vale casi tanto como novela.

Viaje a Arcturus. Un imprescindible para el público que pide retos y quiere dar un paso más allá de la comodidad, un público ávido de arenas movedizas, entendimientos apenas vislumbrados y explicaciones tan opacas como innecesarias.



domingo, 22 de enero de 2017

#RESEÑA - EL PROBLEMA DE LOS TRES CUERPOS de C. Liu



 Autor: CIXIN LIU
Título: EL PROBLEMA DE LOS TRES CUERPOS
Editorial: NOVA
Páginas: 408
Traducción: Javier Altayó




Hay libros que son complicados de reseñar, bien por su argumento, bien por sus giros continuos o bien porque sencillamente no sabes qué decir sin arruinarlo a futuros lectores. Pues bien, El Problema de los Tres Cuerpos de Cixin Liu lo es por los tres motivos al mismo tiempo. Como no quiero hacer ni un solo spoiler, que es la opción que ha escogido mucha gente a la hora de reseñar este libro, voy a optar por una hacer una reseña breve. No porque haya poco que decir, sino más bien justo lo contrario, hay demasiado y es mejor que lo descubráis de nuevas.

Sobre el argumento solo diré que tiene ciencia, mucha, ideología mezclada con filosofía y un posible contacto no terrestre. Eso es todo.




La novela arranca en plena Revolución Cultural China, donde tras un par de puntos de vista, la trama se posará en la figura de Ye Wenjie, física teórica con una moral forjada a base de golpes de martillo de la maquinaría ideológica china. Conoceremos sus motivos, impulsos y motivaciones a la perfección en apenas un puñado de páginas que resultan vitales para el desarrollo de la novela. Y digo esto porque aunque parezca que ella es el hilo conductor, no lo es, Cixin Liu no tarda en dar un largo salto al futuro y situarnos en el presente de la mano de Wang Miao, nanotecnólogo implicado en un proyecto con ramificaciones gubernamentales que de la noche a la mañana ve como su vida se pone patas arriba cuando el comisario Da Shi aparece en escena.

A partir de este momento se suceden los acontecimientos a los que nos acercamos desde la inocente – a veces hasta un extremo que saca de quicio- mirada de Wang Miao, que se ve inmerso en una trama tan extraña como secreta que parece estar llevando a varios de los científicos más ilustres del mundo a suicidarse. En medio de todo esto, un videojuego llamado El problema de los tres cuerpos comienza a ganar fuerza entre las mentes más brillantes y cuando Wang Miao se vea inmerso en él empezaremos a darnos cuenta de las implicaciones de lo que está ocurriendo.



Uno de los enormes puntos fuertes de la novela es su tratamiento de la ciencia. Cixin Liu se cuida mucho de dar lecciones directas, pero tiene una capacidad asombrosa para hacerlo de forma indirecta. A base de metáforas, alegorías y diálogos muy bien trabajados, adquirimos unos conocimientos claves para entender el desarrollo de la trama. 

Si algo se le puede achacar es una cierta tendencia a retozar en sí misma; hay momento en los que el argumento se pausa sin motivo aparente y la pluma del autor parece vaguear hasta que vuelve al camino marcado, no obstante, es cierto que en las dos o tres novelas asiáticas que he leído me ha ocurrido lo mismo lo que me lleva a pensar que se trata más bien de un rasgo característico de su forma de narrar historias. Algo parecido me ocurre con la empatía de los personajes, El Problema de los Tres Cuerpos es una gran novela de ideas pero no de personajes. Por mucho que Liu quiera evitarlo con su abanico de protagonistas, ninguno de ellos – salvo quizá Ye Wenjie al principio- genera la suficiente empatía como para que nos preocupemos por ellos. La trama engancha de manera brutal y sigues adelante por desvelar el misterio y los secretos ocultos en el videojuego, pero en ningún momento sufres lo más mínimo porque a algún personaje le pueda ocurrir algo. La trama es muy superior a los protagonistas y más que capaz de sobrevivir sin ellos.

Recapitulando, El Problema de los Tres Cuerpos es una de esas novelas imperativo. Tienes que leerla sí o sí. Marcará un antes y un después en la narrativa asiática, si es que no lo ha hecho ya, y te dejará una visión de la física como pocas novelas de ciencia ficción conseguirán igualar.

 

miércoles, 18 de enero de 2017

CONCURSO ANIVERSARIO DEL BLOG






 ~~CONCURSO CERRADO~~
GANADOR:
@_aLBERTOGALINDO



Hoy cumplimos un añito y para celebrarlo no hay nada como regalar libros. 
Así que hemos cogido dos de las mejores novedades de los últimos meses para hacer un sorteo único con un premio a la altura.

- Filos Mortales de Joe Abrecrombie
 

 En el ejército de la Unión solo hay un individuo que se cree capaz de salvar por sí solo la situación a la hora de enfrentarse a los gurkos: el incomparable coronel Sand dan Glokta. Curnden Craw y su grupo deben recuperar un objeto misterioso más allá del Crinna. Solo hay un pequeño problema: no saben qué es ese objeto. Shevedieh, la más hábil ladrona de Styria, va de desastre en desastre con su mejor amiga y mayor enemiga: Javre, la Leona de Hoskopp. Después de años de masacres, el idealista Bethod trata de llevar la paz al norte. Solo queda un obstáculo: su lunático guerrero, el hombre más temido del Norte, el sangriento Nueve Dedos.
Violentas y afiladas como las armas de sus personajes, las historias de Filos mortales transcurren desde antes de La voz de las espadas hasta después de Tierras Rojas. Los relatos, situados cronológicamente, siguen hilos apuntados en las tramas de las novelas del Círculo del Mundo, pero todos ellos se pueden leer de forma independiente.

 - Estados Unidos de Japón de Peter Tieryas

Hace unas décadas, Japón ganó la Segunda Guerra Mundial. Los estadounidenses adoran a su infalible emperador y nadie cree que la conducta de Japón en la contienda no fuera ejemplar. Nadie excepto los George Washingtons, una facción proestadounidense que intenta recuperar la gloria de los viejos Estados Unidos. Su última táctica subversiva es distribuir un videojuego ilegal que pide a los jugadores que imaginen cómo sería el mundo si Estados Unidos hubiera ganado la guerra.
El capitán Beniko Ishimura se dedica a captar posibles traidores, cuando un día recibe una misteriosa llamada del general Mutsuraga, y su vida se convierte en una montaña rusa que le llevará a conocer a Akiko Tsukino, una oficial de la policía de Tokio que intenta descubrir la relación de Ishimura con el videojuego que algunos insurgentes están usando para avivar el nacionalismo estadounidense. Pero los orígenes del videojuego subversivo son aún más polémicos y peligrosos de lo que nadie sospecha…



REQUISITOS
Las condiciones no pueden  ser más sencillas, sólo tienes que dar Rt a la publicación de nuestra cuenta (aquí) y seguir el blog. El ganador lo anunciaremos dentro de una semana y rebirá los libros en su casa sin ningún gasto (en envíos nacionales).

Muchas suerte a todos!!

lunes, 16 de enero de 2017

RESEÑA - SOMBRAS DE IDENTIDAD de B. SANDERSON



Título: SOMBRAS DE IDENTIDAD
Autor: BRANDON SANDERSON
Editorial: NOVA
Páginas: 420
Traducción: Manuel de los Reyes
 




Brandon Sanderson, ese hombre que estornuda y saca tres novelas, regresa al mundo de Nacidos de la Bruma con la continuación de las aventuras de Wax, Wayne y Marasi, y si la primera entrega nos dejó algo fríos por la sobriedad de la trama, esta vez Sanderson despliega su arsenal y nos regala un pequeño pero jugoso aperitivo de lo que está por llegar.

Yo soy de esos a los que Aleación de Ley les gustó, partamos de ahí, pero es cierto que la historia era más bien mediocre comparada con la amplitud de miras que tiene la Saga de Nacidos de la Bruma, sin embargo el hecho de ver la sociedad avanzar, los guiños a antiguos personajes, la inclusión de armas de fuego –tan raras en fantasía- y sobretodo, la aparición de nuevos protagonistas, la convirtieron en una novela para disfrutar. Bien, pues ahora Sanderson parece haberse dado cuenta de esto y ha inaugurado una nueva trilogía en este mundo preindustrial, pero con una trama que promete ir ampliándose hasta alcanzar cotas divinas (guiño, guiño).




Debo decir además, que por mucho que me gusten Elend, Vin, Brisa y sobre todo Fantasma, la pareja formada por Wax y Wayne es una pasada. La química que tienen, la compenetración y los secretos que se guardan, así como la profundidad de la que hacen gala, les convierte en una verdadera gozada de personajes. De los dos sin embargo, mi favorito es Wayne, con el que Sanderson ha dado en el clavo y logra un coprotagonista memorable –sus capítulos coinciden con los mejores momentos del libro-, y además lo dota de un humor cínico pero tremendamente divertido del que carecía la banda de Kelsier. Todo ello sin olvidar a Marasi, con la que personalmente creo que ha conseguido introducir una figura femenina fuerte sin necesidad de ser una guerrera vikinga. Es todo lo que le pido a una protagonista femenina con la salvedad de precisamente eso, conseguir más protagonismo, porque se ve muy mermada tras la sombra de Wax y Wayne. De todas formas, viendo el trato que ha recibido en esta novela y como Sanderson se ha empeñado en meterla en contexto y liberarla un poco de la senda de justicieros que tienen los otros dos, estoy convencido de que en próximas novelas se alzará como un elemento fundamental.




Centrándonos en la trama, hay que decir que hay un cuarto personaje fundamental aunque aparece menos y nunca físicamente: Armonía. Para los que hayáis leído Nacidos de la Bruma no hará falta que os diga nada más; sus diálogos, con referencias al mundo antiguo y alguna que otra pista sobre qué puede pasar en su “plano existencial”, conseguían meterme aún más en la intrahistoria que se esconde tras la trama principal. No obstante y aunque su aparición me ha gustado, no ocurre lo mismo con la de otro personaje que no mencionaré pero cuya presencia parece forzada. Sanderson le dota de un nuevo rol y no termina de verse cómodo en él, más bien parece una autoexigencia de Sanderson para satisfacer los deseos de sus lectores que algo que la novela necesite.

Hay un aspecto que Sanderson incluye en Sombras de Identidad que había perdido en Aleación de Ley: la crítica social, el pensamiento colectivo frente a la individualidad, la presión social ante el poder y la forma en la que una comunidad reacciona en función de las acciones de sus gobernantes. Este es uno de los puntos fuerte de Sanderson –junto con la religión- y lo explota maravillosamente bien. La ciudad de Elendel le da un escenario mucho más grande con el que trabajar y los nuevos órganos de gobierno, carta de derechos sociales incluida, dan mucho más juego que la figura tan arquetípica del tirano. Sutilmente se permite incluso hacer una oposición de lo que a todas luces se ve como un capitalismo primigenio y el socialismo idealizado de algunos personajes. Creo que en estos aspectos Sanderson ha puesto especial cuidado y se nota en el resultado. Como contrapunto, el tema de la religión, tan explotado en el Cosmere, aquí pasa a un segundo plano durante gran parte de la novela aunque sigue habiendo algunas reflexiones teológicas interesantes.



De la edición hay poco que decir. Alabada sea Nova y en especial la enorme labor de Marta Rossich, su editora y artífice de las joyas en forma de títulos y ediciones que están sacando. La portada –y más si conseguiste la edición con póster- es genial. En cuanto a la traducción, baste con decir que corre a cuenta de Manuel de los Reyes, lo que a estas alturas ya es garantía de excelencia.

Vemos pues que Sanderson recupera parte de la chispa de su mundo brumoso aunque sin llegar a las cotas épicas de la trilogía original, sobre todo en cuanto a trama se refiere. En cambio, esta vez sus personajes están mucho más pulidos y tienen un trasfondo mucho más profundo. 

In Sanderson we trust.

Nota: Wayne, su cleptomanía y los sombreros. Solo por eso merece la pena leerse el libro :)



miércoles, 11 de enero de 2017

#RESEÑA ¡GUARDIAS! ¡GUARDIAS! de T. Pratchett



 Título: ¡GUARDIAS! ¡GUARDIAS!
Editorial: DEBOLSILLO
Páginas: 395
Traducción: Cristina Macía

 


Y volvemos con SIR TERRY PRATCHETT –sí, con mayúsculas, porque se lo merece, no vayáis a creer que tiene que ver con La Muerte, malpensados todos-, esta vez con el inicio de su Saga de La Guardia y el comienzo de las aventuras de algunos de los personajes más memorables del Mundodisco. Conozco mucha gente que tiene esta novela entre sus favoritas y no es para menos, Una vez más, y ya he perdido la cuenta, Sir Terry lo vuelve a hacer: ¡Guardias! ¡Guardias!

La novela arranca con Zanahoria, un muchacho “enano” un tanto grandote y especial que un buen día se ve obligado a abandonar el hogar familiar camino a Ankh-Morpok, donde se llevará un choque de realidad al descubrir que el mundo es muy diferente de lo que él creía. 



Pratchett utiliza una vez más lo clichés del género para otorgarnos un enorme parodia de las novelas de fantasía tradicionales. Tenemos el arranque más clásico posible, un chico con un pasado misterioso, criado en un pueblo alejado de todo y con unos firmes principios morales que emprende una aventura heroica en la gran ciudad. Allí se encontrará con personajes recurrentes en el disco, la gran mayoría, como no podía ser de otra manera, pertenecientes a la guardia o relacionados con ella. Así nos encontraremos al Capitán Vimes, el Sargento Colon o al cabo Nobby, que cualquiera que haya leído algo del disco seguramente conocerá.

En mi caso, al leer las novelas de forma desordenada, ha supuesto una gran sorpresa encontrarme al Capitán Vimes en semejante estado, pues comparado con el resto de novelas donde es una hombre firme y duro como la roca e igual de respetado, aquí le encontramos al frente de una guardia de tres hombres, borracho e incapaz de mantener el orden, humillado y desprestigiado por ciudadanos y guardias privados y alejado de cualquier posición de verdadero poder. Colon y Nobby en cambio, son tal y como recordaba, solo que en una guardia tan inepta como la que tenemos en esta novela, su falta de rigor policial destaca menos. Hay que decir que Nobby tiene algunos de los mejores momentos del libro gracias a sus diálogos con Zanahoria, cuyos firmes principios morales le llevarán a una discusión tras otra.



Otros personajes que hacen aparición son Lord Vetinari, el eterno dictador benévolo de Ankh-Morpok y Detritus, aunque aquí aún forma parte del otro lado de la línea en lo referente al cumplimiento de la ley.

El desarrollo de la novela es sencillamente genial, además del cliché del joven pueblerino en la gran ciudad, Terry destroza a conciencia otros como el dragón y su tesoro, o el del misterioso héroe armado con una espada mágica que se convierte en rey. La novedad que se permite incluir en esta novela, al menos no aparece en las otras que he leído del Mundodisco, es el giro final con identidad secreta del villano incluida, Terry demuestra que entre tanto chiste y parodia también sabe llevar el ritmo de la novela y guardarse misterios que sorprendan al lector. 
Otro punto fuerte es la inclusión del personaje de Lady Ramkin, una noble regordeta y adorable que se dedica a la crianza de dragoncillos de pantano y que añade un tono genial a un tema tan manido como el de los dragones. Por supuesto, el mejor bibliotecario del mundo - aunque sea un oraguntán- y la biblioteca de la universidad mágica no podían faltar cuando hablamos de Ankh-Morpok y nos regalan momentos geniales que además aportan mási ntriga a la trama. 

El mejor bibliotecario del mundo


Como siempre, no obstante, Terry introduce entre sus líneas grandes verdades aplicables a nuestro mundo, en este caso el archiconocido peligro de la codicia y la ambición. Todo lo que acontece en la novela sucede por la estrechez de miras de un personaje que ansía más de lo que tiene, incluso aunque es valorado en su trabajo y conocido por todos como el mejor en su puesto. No es algo nuevo y no hay que irse lejos para ver casos como el suyo, aunque ojalá todos acabasen igual.

Por último, no puedo dejarlo sin mencionar la genial presentación de los Gremios de Ankh-Morpok, sencillamente sublime. Desde el Gremio de Bomberos hasta el de los Ladrones y Asesinos, Terry consigue un pasaje desternillante, lo cual es difícil por el buen nivel de la novela, y al mismo tiempo introduce el mundo de las callejuelas de la ciudad en las que se desarrolla la obra. Una vez más, se nota la magnífica mano de Sir Terry, mucho más que unos chistes fantásticos.

Si tuviera que ponerle una pega sería el poco trasfondo que tiene comparada con sus últimas novelas del disco, he mencionado que los peligros de la ambición están detrás de todo, como telón de fondo, pero es algo tan viejo que no sorprende. Es una pega muy pequeña pero ahí está. Me han gustado más sus críticas al racismo, el progreso o el tema de la ecología presentes en otras novelas.



Nada más que añadir, un inicio de Saga sublime que invita a continuar con las aventuras de Vimes y Zanahoria y ver el proceso por el cual la Guardia de Ankh-Morpok acabará convirtiéndose en lo que todos los lectores del Mundodisco conocemos.

Una vez más,
Gracias Sir Terry Pratchett.